Lo que quise decir el otro día en el Debate organizado por la Fundación Pedro García Cabrera puede resumirse en lo siguiente.
La política cultural propiamente posmoderna, es esencialmente formalista, es decir, se preocupa de la parte formal del sistema de producción cultural (dicho de otro modo, apoya la creación de equipamientos, desarrolla leyes de incentivo, busca alimentar el proceso cultural en conjunto sin interferir en los contenidos a apoyar) y en ello se opone a la política cultural tradicional, que casi siempre ha sido de contenidos, es decir, orientada hacia la implantación de un material conceptual específico y predeterminado (política cultural de identidad nacional, de identidad de un determinado grupo, puramente ideológica, etc.).
En lo demás no entro. Solo una cosa: es imposible debatir de tantas cosas a la vez como se pretendió...
1 comentario:
Al ciudadano y que soy yo le gustó mucho tu parte del debate.Podrías querida haber dado tu la conferencia y ya está. Es que los demás tienen la pinta de tener experiencias muy interesantes pero es como si no las tuvieran frescas o las hubieran olvidado, tal vez las quieran olvidar.
Lo más gracioso es que algunos de los que estaban entre el público no se atreven a decirte en la cara lo que luego decían por los bares y es lo guapa que estás.En eso querida sigues levantando cierta unanimidad. Luego tienes amantes y detractores por igual, lo que para mi te hace molto interesante.
Cuídate todo lo que puedas, vigila tu espalda.Ya sabes lo que les pasa a los sinceros en tu partido.Hasta después de muertos les acuchillan.
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