En una entrevista aparecida en el País Semanal de 25 de abril de 2010 Vicente Verdú le pregunta a Umberto Ecco si:
“Quizá en este ascenso de los movimientos sociales que hemos dicho se esté fraguando el germen de una democracia distinta, porque, ¿ cómo seguir soportando la idea de que un Gobierno sea elegido para cuatro años y que durante esos cuatro años no se les pueda despedir, tal como si hubieran sacado una plaza de funcionarios?
Umberco Ecco contesta lo siguiente:
“Desde luego no hemos reflexionado lo suficiente sobre el hecho de que hemos llegado al final de la democracia representativa. Cuando en Estados Unidos vota sólo el 5’% de los ciudadanos, y uno debe elegir entre dos candidatos, es elegido con el 25%. Candidatos que nos son elegidos por el pueblo, sino por la organización interna. ¿ A quién representa este candidato? ¿ A cuántos ciudadanos representa? ¿ Cuál es la diferencia con el sistema soviético, en el que el Sóviet supremo elegía tres candidatos, luego discutían y elegían a uno? Que en Estados Unidos existe el control de la sociedad civil, los lobbies, las organizaciones culturales y religiosas, industriales, hay una serie de poderes que controla el poder central, y que en la Rusia estalinista no existía. Pero no es una democracia representativa. Estamos llegando a una crisis trágica de la democracia: seguimos simulando que existe la democracia representativa y que soy yo, el ciudadano, el que elige a mis representantes, pero no es cierto. El nacimiento de estos movimientos sociales fuera de los partidos, que en Italia se llaman los Violetas y se reúnen vía Internet, pueden ser el futuro, o la corrección de una democracia participativa en crisis. Así que yo no soy de los que dicen que se cierre Internet. Habrá que ver qué pasa. Igual que Italia fue el laboratorio del fascismo, que luego copió España, en este momento es el laboratorio del berlusconismo, y habrá que ver qué pasa.”
Es una respuesta que se produce en el marco de una entrevista que profundiza sobre la cultura y la comunicación, y en el que habla de Italia, y de la Italia de Berlusconi, que anuncia situaciones análogas en muchos otros países europeos( en España pensemos en la operación de la Sexta y de El Público, por ejemplo ): donde la democracia entre en crisis, el poder acaba en las manos de quien controla los medios de comunicación…
6 comentarios:
Y seguimos sin saber qué podemos hacer para cambiar la situación...
ME gustaría saber su opinión sobre el informe del tribunal de cuentas ante el masivo uso de los contratos negociados sin publicidad de este, su gobierno canario. ¿Es esta de la democracia que usted predica?
Desconozco el informe. Lo leeré. Una cosa: ¿ dice el informe si esos contratos son ilegales o solo que son muchos contratos negociados legales?¿ Habla de contratos negociados ilegales?
¿Y pregunto yo?Si los contratos negociados sin publicidad están permitidos sin límite de número sino de cuantía ¿qué problema hay?
Para el abogado embajador (que parece que nació ayer): Pues que se trocean, se disfraza su naturaleza de urgencia (fraude de ley) para experimentar la corrupción inherente (Esperanza Aguirre dixit) al gobierno, en este caso, el canario. Visto lo visto, si son legales pues pasen y vean. Cuantos más negociados, menos democracia. Es una cuestión matemática.
Decirle al Sr. Ecco, que no estamos al final de la democracia representativa. Es justo al revés, lo que hace falta es democracia representativa, que en España nunca hemos tenido.
Sobre lo de la baja participación en EEUU, yo alucino. Si en las últimas presidenciales en EEUU se batió el record de participación(70 y tantos %).
La participación en los condados, ciudades y pueblos en EEUU no es baja. Hay sitios donde existe democracia directa(como en la antigua Grecia), en Maryland por ejemplo. Se reúnen los ciudadanos y votan a mano alzada. ¿Hay algo más democrático que eso?. También ocurre en pequeños cantones de Suiza.
Que no tenemos democracia es evidente, pero no es porque se haya acabado...¡es que no ha llegado¡.
El artículo está lleno de inexactitudes del Sr Ecco.
Publicar un comentario