3 años sin Adán

Mañana, día 10 del 10 hará 3 años sin Adán. Le echo de menos, aunque trato de pensar en él como si aún estuviera aquí, porque quiero que su cariño y sus enseñanzas estén siempre conmigo. A veces repaso miles de cosas que escribió, o que escribimos juntos, porque Adán siempre trabajaba en equipo. A veces repaso cómo era para no olvidarme de las cosas buenas y trato de ponerlas en práctica. A veces siento necesidad casi física de llamarle por teléfono, como si pudiera ponerse, como si estuviera en algún lugar por ahí y no se hubiera ido para siempre,  para contarle esta o cual cosa. Miles de veces me he preguntado a lo largo de estos 3 años ¿qué haría Adán?¿qué me diría?¿cómo habría reaccionado? Me he dicho a Adán le habría encantado esto o aquello, o hubiera reaccionado así o de esta otra manera. Tengo un diálogo continuo con él y supongo que es una forma de mantenerle vivo.

   

* Foto: enero de 2010 en su casa, el día de su boda con Pilar.

Tengo la certeza de que Adán hubiera reaccionado a todo lo que nos está pasando con valentía, y desde luego con una visión amplia y abierta. Hubiera vuelto a repensarlo todo y probablemente estaríamos en un camino mejor (como sociedad).

Adán era un hombre abierto a las ideas de los demás, nunca se sentía con la verdad absoluta ni con la razón total, sino que siempre creía que los demás podían aportar algo y por eso creo que se ganó muchos amigos. Completaba sus ideas con aportaciones de todos, y de esa manera nos hacía sentir partícipes de cada apuesta que emprendía. 

Adán era un hombre curioso siempre con ganas de aprender cosas nuevas, y todo le parecía interesante. Quién sabe donde estaría ahora si estuviera aquí. Quién sabe qué estará haciendo si está en algún lugar... Le echo de menos. No le olvidaré nunca.

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