lunes, 19 de septiembre de 2011

DIARIO DE UNA EX POLÍTICA 14.- Sobre la ética y la política

En otra red social en la que participo ( Linkedin ) alguien propone que lo que habría que hacer ( para acabar con la crisis y de paso con la corrupción es crear algo así como una CONSEJERÍA DE "ASUNTOS ÉTICOS".

Creo que es un error. Es poner más controles de entrada y salida de la política. Eso es lo que ha ido pasando poco a poco, probablemente merecidamente por la maldad de unos pocos y el silencio de muchos.

Aun así prefiero a San Agustín:

En cuanto a la Ética, San Agustín parte de que la naturaleza humana está herida por el pecado original pero no destruida, la gracia de Dios la fortalece y le ayuda a alcanzar mejor su fin, pero ella conserva su capacidad de orientarse sola al bien.

O a Platón ( aunque pueda tachárseme de cándida ):

La teoría ética de Platón descansa en la suposición de que la virtud es conocimiento y que éste puede ser aprendido. Dicha doctrina debe entenderse en el conjunto de su teoría de las ideas. Para Platón, aquel que se comporta de forma inmoral lo hace desde la ignorancia. Esta conclusión se deriva de su certidumbre de que una persona virtuosa es realmente feliz y como los individuos siempre desean su propia felicidad, siempre ansían hacer aquello que es moral.

Vigilar es no confiar. No sé cuál es la solución pero no es la vigilancia. Cada día entrará peor gente en política si seguimos así, y en lugar de arreglar el sistema lo estaremos estropeando del todo ( como en Grecia, quienes al fin y al cabo tienen miles de años más que nosotros de "experiencia democrática" y por lo tanto también de "degradación", como se ve... ).

15 comentarios:

Tomascopolo dijo...

Sobre ética hay mucho escrito pero ¿realmente está calando entre los políticos o es peor que se les trate tan mal?

Robin Hood dijo...

Tanto la moral, como el derecho y los usos sociales, forman parte de un todo mayor: la ética. Hablar de ética es hablar del bien y del mal. La ética no es una abstracción, es el otro. Cada acto está obrando directa o indirectamente sobre una vida: "Nunca se roba algo, se le roba a alguien".

Pero ¿¿ los casos como Robin Hood no merecen una reflexión tomascopolo??¿¿es lo mismo robar a los ladrones y a los ricos que robar a los pobres??

Dulce Xerach dijo...

Vaya, de repente, esta entrada ha tomado una interesante deriva. Me pregunto ¿ necesitamos más Robin Hood en la actualidad? Según la leyenda, Robin Hood era un barón llamado Robin Longstride o Robin de Loxsley, quien era de gran corazón y vivía fuera de la ley, escondido en el Bosque de Sherwood y de Barnsdale, cerca de la ciudad de Nottingham. Hábil arquero, defensor de los pobres y oprimidos, luchaba contra el sheriff de Nottingham y el príncipe Juan sin Tierra, que utilizaban la fuerza pública para acaparar ilegítimamente las riquezas de los nobles que se les oponían. ¿Quién podría jugar hoy en día el papel de Robin?

Óliver dijo...

Pregunta incómoda, pero necesaria, crítica, sincera y sin ánimo de polémica gratuita:
¿Cómo se siente una persona interesada en la ética al compartir asiento en un parlamento con otras personas de su mismo partido sobre las que descansan tantas sospechas de corrupción?

Dulce Xerach dijo...

Depende. Por cada una te sientes distinta. De unas sabes que las acusaciones son injustas, de otras no. Y de otros sabes que deberían estar acusados y no lo están. En general pienso en una frase de la Biblia: " que tire la primera piedra quien esté libre de pecado".

De todas formas Oliver ya no estoy en ningún Parlamento, he dejado la política y lo he hecho voluntariamente. Ahora intento sentir desde fuera de la política, como una ciudadana más.

Marina dijo...

Estoy de acuerdo Dulce, yo sigo la Cábala y todos hemos cometido errores, pero hay que seguir adelante, lo importante es que intentemos hoy ser mejores que ayer. Gracias por ser sincera.

Óliver dijo...

Sí, Dulce, ya sé que no estás en política, el rótulo de tu blog lo indica. Pero estuviste en esa situación y la pregunta me pareció pertinente. Tu respuesta me deja un poco inquieto. ¿Sabes que esa misma frase la utilizó José Joaquín Ripoll, imputado en el "caso Brugal"? Por ese motivo, el opositor del PSOE en las cortes valencianas le tiró la piedrita (real) a Camps allí. Ésta es la noticia:

http://www.rtve.es/noticias/20100927/portavoz-socialista-cortes-valencianas-lanza-piedra-a-camps-para-decirle-esta-libre-del-pecado-corrupcion/357157.shtml

P.S.: creo que te equivocas profundamente. Un saludo.

Dulce Xerach dijo...

¿Sabes por qué creo que -en general- y en esta cuestión, no me equivoco? Porque yo también estuve imputada 3 años, y salí INOCENTE. Salí absuelta. No hubo ni caso, después de 3 años: se archivó. Pero mientras tanto, durante esos 3 años que se me hicieron largísimos a mi y a mi familia sufrí muchísimo. Y no es el único caso así que conozco. Así que a mi mientras no me den una sentencia firme no me digan que nadie es culpable... Lo siento, no lo admito. Por cierto, nuestra constitución de 1978 no lo admite tampoco:

"Artículo 24.

1. Todas las personas tienen derecho a obtener la tutela efectiva de los jueces y tribunales en el ejercicio de sus derechos e intereses legítimos, sin que, en ningún caso, pueda producirse indefensión.

2. Asimismo, todos tienen derecho al Juez ordinario predeterminado por la Ley, a la defensa y a la asistencia de letrado, a ser informados de la acusación formulada contra ellos, a un proceso público sin dilaciones indebidas y con todas las garantías, a utilizar los medios de prueba pertinentes para su defensa, a no declarar contra sí mismos, a no confesarse culpables y a la presunción de inocencia."

Fanny Gonzalez dijo...

++ Dulce.

Estoy contigo. Nadie es culpable hasta que se demuestre.

Óliver dijo...

En realidad, no quería atacar la presunción de inocencia. Efectivamente, ésta debe ser defendida de forma tajante. Yo me refería a tus propias palabras, cuando dices eso de:

"Y de otros sabes que deberían estar acusados y no lo están"

Bien, Dulce, eso no es presunción de inocencia, sino lo contrario. Cuando digo que debemos ser críticos con la corrupción me refiero a esto, a no dejar la puerta abierta con argumentos como los de no poner controles para entrar en la política y, a la vez, pensar que todos podemos tirar una piedra en un momento dado. Para mí, esto es un error pues sólo nos lleva a una ambigüedad y a una permisividad implícita innecesarias. En mi opinión, pienso que debes separar lo personal del debate sobre la corrupción. Sólo con la intolerancia hacia ella, sin ambigüedades, sin límites, denunciando los casos que conozcamos (como tú con algunos de tus compañeros) o exigiendo el análisis riguroso de los que no conocemos, (conlleve éste el tiempo que conlleve -como, por desgracia, en tu caso- y siempre por medio de la presunción de inocencia), el problema de la corrupción y, en fin, de la falta de ética, pueden desaparecer.

Dulce Xerach dijo...

Es cierto, no debí decir esa frase. No tengo certezas, solo sospechas. ¿vale como retirada?

Óliver dijo...

Dulce: me encanta comprobar que lo mejor de ti sigue en pie. Un beso.

OLGA dijo...

OJalá vuelvas a la política algún día, cuando el sistema sea más propicio a gente como tu.Nos vendría mejor a todos.Nadie es profeta en su tierra, y es cierto, lo dice la Biblia y lo hemos comprobado, entre otros muchos contigo.Pero algún día...

Anónimo dijo...

our future depends on the ability of leaders to transform the organizations they lead as quickly and effectively as they absorb powerful new technologies–and in sync with the capabilities of those new tools. I recognize that it will surprise people to hear this, but sensemaking is in fact the primary mission of the Central Intelligence Agency. Before I retired from the agency last year, I had spent almost 32 years in its myth-shrouded corridors trying to make sense of the world. I feel quite blessed for having had that experience. My career spanned the Cold War, South Africa’s apartheid policy, America’s dominance of world affairs, the rise of terrorism and the emergence of a new, more complex age in international relations—the period we are living through today. ( de Carmen Medina )

Anónimo dijo...

También deberíamos tener en cuenta el problema de las TICS: la neutralidad de la red debería incluirse en el elenco de los derechos civiles