domingo, 9 de noviembre de 2014

¿Cómo no celebrar la caída del Muro de Berlín?


Estuve en Berlín antes de caer el muro y luego tres años después. El cambio fue sorprendente. La segunda vez que fui Fernando y yo quisimos experimentar el Este de la ciudad.  Había pasado demasiado poco tiempo como para que no se notara, aún olía a Este en algunos lugares, pero ya empezaba a respirarse una libertad total en calles como Friedrichstrasse o la calle Oranienburgerstrasse, llenas de street art.







Otra cosa que recuerdo son los lugares de música alternativos como el Bunker o el Tresor, algunos de ellos siguen en pie y continúan con ese aire subversivo de los primeros 90.









1 comentario:

Anónimo dijo...

A ver si caen otros muros invisibles pero que están ahí.