jueves, 9 de octubre de 2014

4 años sin Adán y nada es igual


Mañana 10 de octubre es la fecha fatídica. 

El 10 del 10 del 10 perdí al mejor amigo y al mejor maestro. 

Muchos perdimos a alguien que sentíamos valioso. Sigue siendo como un metal precioso, inestimable, admirable, porque nos dejó su enseñanza. Me siento discípula de sus ideas, y sobre todo de su estilo: trabajo, trabajo y trabajo y no creerse nunca que uno está por encima de los demás. Lo seguimos echando de menos todos los días pero los días 10 especialmente. Su valor se incrementa cada día que pasa en comparación con todo lo que ha pasado después, poco a poco, en la distancia, con los años, cada día queda más clara su labor inmensa. Desde aquí mi tributo personal a todo cuanto hizo. Eramos pocos los que estábamos en aquella sintonía y luchábamos por hacer las cosas cada día mejor. Eso nos enseñó: a hacer bien lo que había en hacer, siempre, en cada momento. Y pasarlo bien siempre que fuera posible. Compartirlo todo, discutirlo todo, intentarlo todo.




*En las fotos celebrando uno de sus cumpleaños entre amigos y familia. Celebrando su vida.

5 comentarios:

John Steven dijo...

Gracias por recordarlo Dulce, es cierto, nada es igual, fue un ser excepcional. El mejor político que ha tenido Canarias.

La máquina dijo...

Se les ve felices. Qué tiempos aquellos. Que tiempos de unidad tan únicos.

Jose Manuel dijo...

Mañana tenemos una cita importante Dulce, una cita con su memoria. Irrepetible persona.

Dulce Xerach dijo...

He supurado la herida que supuso su pérdida pero no la he superado. He aprendido a vivir sin el pero sigo echándole tanto de menos....intentó no olvidar ninguna de sus palabras, de sus consejos importantes, de su cercanía

Manuela dijo...

Te pasa porque la vida es demasiado dura para la gente sensible. Ánimo Dulcita.