jueves, 27 de noviembre de 2008

EXTRAÑOS SENTIMIENTOS, LOS CELOS...

Estoy leyendo dos libros muy distintos, En defensa de la Felicidad de Matthieu Ricard y La Audacia de la Esperanza de Barack Obama y ambos hablan de la esperanza, la felicidad, el altruismo necesario para conseguir ambas.

Pero en ambos aparecen los celos.

Concretamente Matthieu Ricard escribe lo siguiente: “Pascal Bruckner habla de esos individuos para los que no hay nada más intolerable que la visión de la felicidad de los demás cuando a ellos no les van bien las cosas. En realidad, ¿ qué puede quitarnos la felicidad de los demás? Nada, por supuestos.

Tan solo el ego puede resultar magullado y sentirla como un dolor. Es el ego el que no soporta la alegría de los demás cuando estamos deprimidos, ni sus salud resplandeciente cuando estamos enfermos?

Necesitamos lecciones para controlar el ego, pues……

En el libro de Obama después de hablar de celos y zancadillas en los pasillos políticos escribe: De hecho, con sus rígidas doctrinas, su estilo de rompe y rasga y una sensación exagerada de haber sido atacados, estos nuevos líderes conservadores recordaban extrañamente a algunos de los líderes de la Nueva Izquierda de los sesenta: contemplaban la política como una contienda no solo entre visiones políticas distintas, sino entre el bien y el mal. En esta lucha maniquea, la voluntad de pacto empezó a verse como una debilidad, y se castigaba o perseguía. Estás con nosotros o contra nosotros. Tenías que escoger bando.

¿ No les suena esto de algo...?

5 comentarios:

insider dijo...

A mí me suena demasiado. En la política que se ha instalado en estas islas la autocrítica, el librepensamiento, la intelectualidad,... están en peligro de extinción, si es que no han desaparecido totalmente. El populismo, la demagogia, las zancadillas, ... es el pan nuestro de cada día. La culpa: de vosotros, los políticos, que habéis hecho oído sordos a lo que pasa a vuestro alrededor y muchos participáis de esta merienda de negros... En fin...

Anónimo dijo...

Todo eso que comentas, Dulce, es el pan nuestro de cada día en la política canaria y en todas partes donde exista un atisbo de poder, es algo consustancial al ser humano. Muchos de nosotros concebimos nuestra felicidad (me incluyo por si acaso..jajajja)en estar por encima de los demás ya sea en cuestión de cultura, poder, belleza......nos da igual, lo que importa es estar sobre los demás.

PD: Conocí tu blog este lunes en la tve2 y me resulta muy interesante. Un saludo
Pedro Martín

Anónimo dijo...

Señora Xerach, una recomendación: si quiere informarse de los grandes temas sobre los que ha reflexionado el ser humano a lo largo de su historia, no lo haga consultando obras de salón. Lea, por ejemplo, la "Ética" de Spinoza (edit. Trotta), cuya lectura, por lo demás, resulta de lo más amena; en ella encontrará, como pocas veces se ha dado en el pensamiento universal, una visión "coherente" de lo que debe ser la felicidad entre seres humanos. Y si después de leerla sigue interesada en el asunto, puede consultar "El error de Descartes" y "En busca de Spinoza", del reputado neurólogo António Damasio, o "La conquista de la felicidad", de Bertrand Russell. Un saludo.

Guillermo

Dulce Xerach dijo...

Etica de Spinoza y la Conquista de la Felicidad de Rusell los he leído, sobre todo la primera que me encanta. Gracias por los otros libros recomendados.

En cuanto a que solo nos votan incultos, no lo creo, son cientos de miles de personas las que nos votan, y yo sí creo en ellas y las respeto y admiro su inteligencia, y su sabiduría.Y les respeto como demócrata. Igual que respeto profundamente a los que no nos votan.

Dulce Xerach dijo...

Hola intenso

no creo que la culpa sea "solo" nuestra, de verdad.

pero es verdad que la política está insoportable y aburrida, porque es que ya no hay ni sentido del humor